ARRANCÓ UN TROZO DE SU VIDA
Arrancó un trozo de su vida, para darla en adopción
Quebró su corazón para sentir solo a medias
Vació su alma de promesas
Cambió la eternidad de un sueño por un tiempo a su lado
Se transformó en aire para ser su única respiración
Cobijó sus penas en una caja fuerte
Dijo sí a lo que era no
Vaciló frente a una caricia ajena
Disimuló su dolor, convirtiéndolo en mueca
Era un extraño para sí mismo
Un experimento para la soledad
Su casa se pintó de los colores de la ausencia
Nadie era su anhelo, solo quiso volver a ser un todo junto a quien amó
EN ESTA HERIDA QUE ES MI CORAZÓN
En esta herida que es mi corazón
Guardo tus risas que sonaron en el centro de mi amor
Las noches que duermo sin soñar
Son los viajes que completo sin tu mirar
De tantas horas imaginándonos juntos
No sé en qué tiempo he de volverte a susurrar
En los reflejos de mis deseos vives agarrada
Te amé en un tiempo que amar era la vida
Me diste tu cuerpo como una ciudad entera,
Donde perderme en cada callejuela
Subimos a todos los trenes de la pasión
Todos eran de una sola dirección
Vivimos de golpe el verbo amor
No conjugamos más palabra que deseo y fervor
En este hueco que es mi vacio sin ti
Espero sin tiempo, que llegues vestida de nuestro amor.
AY AMOR QUE VIVES SIN MI
¡Ay amor que vives sin mí!
¡Ay boca que caminas sin mis besos!
Lejanía que solo eres deseo
Miradas lanzadas al cielo que te cobija
Abrazos fríos y silentes
Siempre solos entre tanta gente
¡Ay amor que vives sin mí!
Dame las llaves de tu encuentro
No partas de mi presencia
Déjame existir en tu ausencia
Soy palabra en tu calma
¡Ay amor que vives sin mí!
No tengo más, solo soy versos hecho carne
No me olvides que tengo un paraíso que regalarte.
¿DE DONDE LLEGÓ LO QUE YO SIENTO?
¿De dónde llegó lo que yo siento?
¿Serán versos sueltos de un poema que olvidé?
Sé que mi amor es una mañana fresca que no acaba nunca
Sé que tus besos son agua que sacia mi sed de sentir
Camino por sendas de arboles que vivieron siempre junto a mí
Arboles que guardan las señales de un amor sin tiempo
Confundo la luz del día con tu risa
Escribo versos, que son dibujos de tu cuerpo
Me digo que solo es amor
Que nada perdura, que todo pasa
Soy lo que escribieron poetas: “un loco de un tiempo que ya pasó”
¿De dónde salió la palabra que se viste de amor?
Para recitarte lo mucho que te amo
Oigo los sonidos que te anuncian, que ya estás en mí
Saboreo el néctar de tus palabras
Me pregunto una y otra vez
¿De dónde llegó lo que yo siento?
No encuentro respuesta, miro a mi lado y solo estás tú.
MIEDO QUE RONDAS MI VENTANA
Miedo que rondas mi ventana
Noche que no dejas paso a la mañana
Sombras que duermen junto a mi cama
Silencios que enmudecen mi voz
Ansias de volar hacia el infinito
Sabanas forjadas de sudor gélido
Memoria convertida en pesadilla
Angustias que asfixian mi boca cerrada
Sueños de eterna caída
Miedo que rondas mi ventana
¡Déjame dormir, que solo soy un soñador!
¡No detengas mi sueño, déjame partir, que me espera mi amor!
Fantasías que mis ojos transforman en realidad
Ventanas que olvidaron la claridad
Almohadas de piedra helada
Miedo que rondas mi ventana
No soy yo a quien buscas
No soy yo a quien asustas
Es mi cuerpo solo y vacio
¡Vete de mis sueños, que quiero seguir amando!
YA NO PASEAS JUNTO A MÍ
Ya no paseas junto a mí
Ya no siento tu cuerpo abrazado al mío
Te has vuelto invisible para mis ojos
Te has vestido de lejanía para mis encuentros
Ya no paseas junto a mí
Te di un regalo y solo miraste el envoltorio
Te envíe un millón de besos, y cerraste tu ventana
Me quede sin voz de cantarte mi amor
Solo escuchabas la radio, solo querías oír el dolor
Ya no paseas junto a mí
Ahora soy una calle de una sola dirección
No tengo miedo a tu adiós
No quiero ser solo unas palabras en el rincón de tu memoria
Esto es solo el final de una triste historia
Ya no paseas junto a mí
He aprendido a saber despertar sin ti.
TE AME TANTO QUE NUNCA SUPE CUANTO TE AMABA
Te amé tanto que nunca supe cuanto te amaba
Te hirieron tantas veces mis palabras, huecas y alejadas de tu corazón
No supe ver tu sonrisa llegando a mi encuentro
No quise ser solo un hombre enamorado
Perdí de vista las manos que solo ofrecían caricias
Deje que te marcharas cuando aún estabas llegando a mi vida
Tanta alegría, y no tuve ni una solo risa que darte
Me mirabas despacio, casi sin que tus ojos dejaran de viajar a un mundo lleno de nuestras noches
¡Qué maldito duende cegó mi corazón!
¡Cómo no vi que eras lo que siempre quise tener!
Ahora paseo por esta playa, camino solo, solo con tu sombra dibujada en la espuma de cada ola
Donde estará tu cuerpo para darle los mil abrazos que no te di
Como quitar de mi piel y de mis labios, este sabor amargo que envenena mi sueño
Te ame tanto que olvidé lo mucho que te amaba
Si alguna vez oyes un llanto, que en sus quejidos pronuncia tu nombre
¡Por favor te lo pido! Déjame ser contigo quien siempre quise ser
Si ya tu cuerpo es solo aire, envuélveme abrazado a ti
Llévame a esa dimensión donde ahora sé que estás
Déjame amarte, como siempre te he amado
¿QUIÉN ESCBRIBIÓ NUESTROS NOMBRES?
Olas ausentes que nada traen
Silencios que gritan sentimientos
Tu recuerdo llenando las calles de mi añoranza
Recuerdos que se disfrazan de tristeza
Nuestras manos sobre la tierra, moldeando arcilla con palabras que dicen ¡Cuánto nos amamos!
Tu mirada entrelazada con mis deseos
Te miro y te siento callada, callada pero no en silencio
¿Quién pudiera ser el ladrón de esa mirada?
Mirada que llena mi corazón de sangre, para vivir un soplo más amándote
¿Qué amor escribió nuestros nombres?
Nombres solos, que navegan en busca de un rincón donde amarse.
Letras que unen un mundo de emociones
Hechas para vivirlas el uno junto al otro
Frases que se unen en un poema eterno donde habitan tu cuerpo y el mío
¿Quién escribió nuestros nombres?
¿Cómo pudo olvidar que ya solo seremos dos almas que se buscan?
Sin un camino que señale ese lugar donde vivirán las palabras de amor que no nos dijimos
Palabras que viajan envueltas en cálidos aires
¿Quién escribió nuestros nombres?
Si fuiste tú, amor sin memoria, ¡déjame escribir sobre ti el nombre de mi amada!
¡Déjame ser quién te ayude a encontrar esa parte de mi ausencia!
Dame un trocito de tu universo, solo un trocito pequeño y cerca de tu sonrisa
¿Quien escribió nuestros nombres?
Como decir tanto amor, si solo soy una lagrima en tu noche
Te amo porque solo se amarte, no tengo nada más que darte
Escribe tu nombre en mi boca, y serán besos todos mis versos
¡Dímelo! Mi corazón se está quedando mudo
¡Dímelo! Que soy yo el nombre que besas en silencio.
¿Quién escribió nuestros nombres?
Fuiste tú amor, que juegas con mi alma, y solo deseo ser ese juguete
Llegaste de un sueño lleno solo de tú
presencia,
cambiaste todas las estrellas que miraba
de noche,
el tiempo dejó de existir, solo
vivía para tus encuentros.
La calma se instaló en mi mundo,
tus gestos desnudaron mi paisaje,
mi amor se volvió carne.
Me aferré a mi corazón, para
sentir el tuyo.
Todo era amarse;
De pronto desperté, Y llegó el
viento,
una lagrima, y desperté.
Amor que vistes de arena mi piel
Amor que mojas mis sentidos con este agua
salada
Cada gota de ti es un océano de pasión
Sin decir palabras veo cada puesta de sol,
donde me recuerdas cuanto me amas
Miro mi reflejo en el espejo y solo veo tu
silueta
Mi imagen me devuelve abrazado a tu cuerpo
Olvido mi nombre si tú no me llamas
Te amo porque solo vivo en tu amor
Siempre me das el abrazo que espera mi
soledad
Amor que me regalas días enteros para
decirme cuanto me quieres.
Amor que engalanas mi espacio de luz y de
aire
Luz para no dejar de verte siempre, y aire
para que mis palabras de enamorado lleguen a ti.
Amor que alimentas mis labios con tus
besos que saben a miel
Amor que te siento en esta playa donde te
amé por primera vez
Donde las olas nos envolvieron de fuego y
de besos infinitos
Esta es mi piel, la que espera tu agua
para seguir siendo vida
Amor que paseas junto a mí vestida de
amanecer
Amor que solo tengo ansias de volverte a
querer
¡Ay amor que vestiste para siempre de
arena mi piel!
De largos silencios se construyó nuestro
amor
De inmensas soledades vivimos los dos
De mundos creados donde no estamos ni tu
ni yo
De vidas que solo viven con nuestro vacio
Almas que vagan sin un soplo de esperanza
Cuerpos que ya no sienten las caricias de
una pasión
Afonías de tanto gritar palabras sin voz
Mares en calma, sin barcos ni horizonte
Espaldas que cargan vidas llenas de
instantes robados al sueño de ser amados
Silencios que fabrican universos llenos de
nuestros deseos
Cicatrices que son poemas de tantos
rumores
Vidas sin cara, hechas al latido de tantos
dolores
Silencios que construyen amores
Largos paseos robados a la noche sin luna
Ayes sin un suspiro con quien agarrar una
mano llena de tu vacio
Vidas que vivirán en un infinito lanzado a
la busca de nuestros besos
Te grito y mi voz no tiene palabras
Me besas y tus labios se desdibujan entre
tu cuerpo y mi boca
Silencios que construyen amores
Amores que solo viven en los silencios
Te amo con la voz de un niño asustado
Eres quien me recuerda que aún tengo
tiempo para encontrar tu cuerpo
Eres cada lágrima que cae en mi mano, seca
de tu ausencia
Te amo con las prisas de un condenado
Me traes un camino donde encontrarte
Siempre te escondes para sorprenderme
Eres mi guía mi brújula, toda mi llegada.
Te veo en cada puesta de sol, en cada
amanecer
No hay nada que tus ojos no miren junto a
los míos
Somos tanta vida que ya no podemos ser
otra cosa
Te amo en las tardes en que no sabes donde
estaré
Te siento en los sonidos de cada sinfonía
Eres todo mi escondite
El lugar que refugia mi corazón abatido
Cuando la vida me devuelve la memoria
dañada
Estás porque formas parte de mi piel
cansada
Te recibo en mi cuerpo todas las noches de
soledad y congoja
Sabes cómo abrazar mis miedos
Con esa paz que traes envuelta en tu
mirada
Con ese sabor que me dan tus labios
Que siempre se pintan de esperanza para
que tus palabras suenen a sueño
Te amo, sí te amo, y quiero perderme
siempre, para saber que tú me encontrarás
Eres todo mi escondite, y yo solo quiero
ser el abrazo del primer encuentro
Llego de un país donde los amantes sueñan
en colores
Donde cada beso tiene mil sabores
Sintió que la vida era solo vivir
Que nada era más bello que sentir
Amó como se aman los que parten a un viaje
sin retorno
Le entregó su vida, sin miedo a que llegará
el otoño
La vio despertar cada mañana
La quiso en silencio como quieren los que
siempre se amaron
Su mundo se vistió del color de su risa
En su cielo volaban los pájaros más bellos
de la tierra
Nada había más dulce que quererla
Llegó de un país donde la noche es una
manta de luces para amarse sin miedo al amanecer
Ahí en ese país lleno las paredes con su
nombre
Trajo una maleta cargada de todos los
besos que se dan los que conocen el verbo amar
Llegó de un país donde los poetas son
ciegos
Donde sus poemas están escritos con
caricias de enamorados
Llegó para quedarse junto a ella
Para tener una esperanza a quien darle lo
que su corazón siempre soñó
Llegó de un país, que olvidó, al conocer a
quien tanto amó
¡Ay dolor que abandonas tu miedo para
anidar en mi casa!
¡Ay esperanza que me dejas desnudo sin
abrigo ni cobijo!
¿Hacia donde partieron las palabras de aliento?
Son tantas las veces que te quise olvidar
y no pude
Tantas las que llegaste a mí disfrazada de
comienzo
Ahora sé que tú y yo somos una historia
que vivirá en la caricia de un sueño
Seremos un universo por explorar
Estaremos en todos los comienzos que
cantan historias de amor
Nada nos hará desaparecer, porque siempre
existimos
De ti y de mi, brotaran versos de un amor
que llorarán los poetas al recitarlos
Sentimientos creados por los dioses que
cobijaron a Eros
En ese lugar sonde nos escondemos a
llorar, ¡ahí estaremos!
Donde solo alcanzan a ver los corazones
que aman
Siento que mi cuerpo vibra recordando cada
uno de tus gestos
Mi mirada es azul cuando veo el mar que
esconden tus ojos
Todo lo que siempre fui, solo era una gota
de este manantial
Agua que llega para poderte amar
Sentimientos para no olvidar
Tengo en mi estrella un rincón para que
vivamos los dos.
Con esa mirada que es un puente entre tú y yo
Con las caricias que nos robó el tiempo
Esos besos que se perdieron en un frio
invierno
Con ese esperar incierto
Con tu hola y mi adiós
Sin decirnos palabras de amor
Envueltos en el abrigo de un instante sin
temor
Caminamos por atajos que nos pierden para
no encontrarnos
Sendas de silencio, ahogados por nuestros
soplos de deseo
¿Qué luces se apagan con nuestra llegada?
¿Qué oscuridad vive entre mis manos y tus
labios?
Somos lluvia que no moja
Aire que nos mira con desdén,
Enojado con la ausencia de nuestros
cuerpos sin abrazar
Trazos de una vida sin forma, carne de
amor callado
Destinos de tinta borrados
Este reloj que anuncia mi partida, sin
equipaje ni memoria
Este tiempo que nos despoja de un comienzo
sin escribir nuestra historia
Nos difuminamos al final de la calle
Sin árboles que den sombra a mis versos
Fuimos principio, amanecer de fulgores
dorados
Pero la vida nos convirtió de repente en
destinos borrados
Esas canciones que no sonarán de nuevo
Esa música que olvidó su partitura
La inspiración que voló hacia el cielo
Letras de un amor hecho de locura
Todas las canciones nos abandonaron
Todos los músicos se suicidaron
Nadie oyó una nota pintada de blanco
Todas quisieron ser negras y fusas
La lirica abandonó a los solitarios
Ni una balada se apiadó del malherido de
amor
Solo un tambor seco y ausente recibió al
dolor
Tiempos de ruido atenazaban al poeta
Ya nadie cantaba, solo el cuervo graznaba
¿Quién mató a la música?
¿Hacia dónde emigraron las canciones de
amor?
El ruido invadió a nuestro pobre corazón
Todo sentimiento se encogió de miedo
Las voces quedaron afónicas
Mi amor perdió tu compás
La tristeza vino para quedarse en mi
cuerpo
Y me pregunté hasta la locura ¿Dónde se
esconden?
Esas canciones que no sonarán de nuevo.
Aún siento las notas de un piano
imaginario
Aún mi voz sigue cantando las mismas
canciones a tu lado
Tantos años unidos en una misma estrofa
Tantas sonrisas lanzadas a un mundo que
solo es tuyo y es mío
De ese viaje que nos trajo desde la
adolescencia a esta locura de seguir cantando
De saber que nunca seré un solista,
Que mi voz, será nuestra voz
Que no importa el tiempo ni el lugar
Solo importa la música y nuestro cantar
Tantas horas compartidas de melodías,
en un universo creado solo para los dos
Desde entonces y hasta ahora,
nuestra vida es una constante banda sonora.
No quiero nunca dejar de tenerte a mi
lado, cantando
Si existe entre nosotros música, no pasan
las horas
Saber que siempre seremos, lo que siempre
fuimos
Dos voces que la vida unió, y que ya
navegan en un paraíso de canciones
Quiero en este día especial, regalarte mi
más hermosa canción
No tiene letra solo es música. “gracias
por ser quien eres conmigo”
El resto es el perfume de mi corazón.
Ya no hay tiempo para decirnos que no
Solo quedan horas para no dejar pasar al
dolor
Intentamos vivir a espaldas de la verdad
Cuantas veces te has ido sin quererme
hablar
Cuantos silencios llenaron nuestro vacio
Se rompió la luz que inundaba nuestras
palabras
Dejamos de ser nosotros, fuimos dos
caminos
Marchamos deprisa, buscamos salidas
Nada encontramos, se abrieron de nuevo las
heridas
Ya no hay tiempo para la esperanza
Nos abandonó sin decir adiós la añoranza
Gastamos de golpe todas las sonrisas
Dejamos sin vida la alegría
Nos llenamos de miedo y cobardía
¡Acabemos con esta locura!
Ya no hay tiempo, se suicido la ternura
Quiero mi vida sin la tuya
Quiero mi alma sin llanto ni agonía
Ya no hay tiempo para querernos, vida mía.
Y ahora que todo ha
terminado
Me dejas verte de cuerpo entero
Si no fuese por mi amor, te abandonaba bajo este aguacero
Siempre quise dejar detrás de ti la puerta cerrada
Pero en tu corazón pusiste una alambrada
La de noches que te cante baladas de amor
Y a ti no te importaba escuchar mi dolor
No sé, si ahora me buscas
No sé, si tú sonrisa es ahora cierta
Tengo miedo a dejarte la puerta abierta
Te acercas y te vas de mi vida como la buena suerte
Ya no me gusta jugar a perderte
Esto es una locura, no una historia de amor
Tengo ganas de encontrar una mano a la que estrechar
Una cintura a la que abrazar
En tu cuerpo solo hay rincones que no quieres enseñar
No sé, si ahora me buscas
No sé, si tú sonrisa es ahora cierta
Tengo miedo a dejarte la puerta abierta
Le grito a mi corazón que no eres a quien he de amar
Pero el muy canalla ignora mi bramar
Ni mis ojos quieren dejar de mirarte
Me recuerdan que eras de mi alma una parte
¡Y ahí caminas como un deseo imposible!
Dejando mi besos y mi boca desierta
Me estoy mintiendo, como siempre
Te espero de día y de noche, con la puerta abierta.
No hables cuando estamos diciéndonos adiós
No dañes este momento de una despedida sin
dolor
Llegó el día de alejarnos sin habernos
amado
Tantas miradas llenas de vida
Tantos silencios, que son gritos de un
amor que vivirá en la soledad de un corazón con muletas
No quiero oír tu voz, si no es para decir
mi nombre
No hables, cuando solo quiero perderme en
mi tristeza
Quiero borrar cada sueño que contigo
compartí
Quiero olvidar como se alejó de nosotros
la pureza
Este silencio que me llena la vida de mil
gritos que nunca nos dimos
No sé vivir con la palabra de un amor que
enmudeció
No sé caminar si oigo el eco de tu mirada
No hables, si la noche perdió todas sus
estrellas
Calla, cuando un ángel nos abraza con su
indiferencia
Donde habita este amor que vive entre mi
noche y tu mañana
No dejes que tu boca diga palabras de amor
No llenes el vacio con este gran dolor
Dejemos que nuestras vidas marchan a un
mundo de distinto color
No hables cuando estamos diciéndonos adiós
No dañes este momento de una despedida sin
dolor
Llegó el día de alejarnos sin habernos
amado
Deje mi alma guardada a plazo fijo
Me contaron que el amor vendría tras la
inversión
Puse a buen recaudo a mi pobre corazón
Anunciaron los mercaderes que no era
tiempo para amar
Esperé impaciente la llegada del interés,
convertido en pasión
Escondí mis sentimientos de cualquier
especulador
¡No sientas, me gritaron!
¡No dejes que tu boca aguarde besos!
¡Calla tus palabras de enamorado!
¡Borra tus versos, son de un tiempo
pasado!
Así me llene de un deseo insufrible
Así fui forjando mi condena
Hasta que un día llego lo que tanto esperé
Abrí la cuenta de mi alma atesorada
Solo encontré vacio y arena
El tiempo y la espera se lo llevaron todo
Me quede triste con el abrazo de una pena.
Sin una mañana en la que ver tu rostro
Sin un amanecer en el que amarte de nuevo
Con mis manos vacías sin tu cuerpo
Cada gota de sudor perdido, sin sabanas que empapar
Me envuelve esta nostalgia de vivir sin poderte amar
Asomado a mi balcón, en estas tardes de lluvia
Sintiendo que se van con el agua, cada beso que no te doy
Perdiendo caricias en mis manos abiertas
Buscando un mañana juntos, olvidándome del hoy
Los cristales de mi ventana, son mapas donde siempre señalan tu boca
En el principio de la oscura noche
Vuelven a herir mi agonía estas tardes de lluvia
Quiero soñar con un despertar, donde solo el sol sea mi cómplice
No quiero esta vida llena de tardes de lluvia
No quiero ver cada gota de agua, si no es mojando tu cara
No se sentir la vida si no es amándote
No puedo caminar por esta senda
Si no te tengo, me cubre esta locura de Quijote
Déjame cabalgar hacia tu encuentro
Esconderme en tu corazón, muy adentro
Desnudemos nuestras almas, en las tardes de lluvia
Somos pozos de un amor infinito
Si nos queremos, dejemos que viva este amor
No quiero más, solo estar contigo
Y ahora que todo ha cambiado de repente
Que no te encuentro entre tanta gente
Ahora que se cuanto te amé
Me olvido de tu mirar inocente
Ya no tengo lágrimas que ofrecerte
Te fuiste de mí sin soltar mis manos
Me dejaste vacio este corazón que era tuyo
Ahora que todo ha cambiado de repente
Abandonaste mi vida al otro lado del
puente
Aún siento el aroma de tu desidia
Guardo en mi alma todas tus miradas
perdidas
Si la vida nos vuelve a juntar
No me digas nunca que una vez me dejaste
de amar
Déjame vivir en el olvido de un querer que
me araño el corazón
Descubramos de nuevo cada caricia
Amémonos como dos ciegos, que se desnudan
en una noche eterna
Y ahora que toda ha cambiado de repente
Que no te encuentro entre tanta gente
Ahora que se cuanto te amé
Me olvido de tu mirar inocente
En mi casa tengo las paredes pintadas del
color de tus ojos
En mi cama viven los deseos que tengo de
volver a amarte
Si alguna vez me ves pasar a tu lado no me
sonrías
O sentiré esa boca mordiendo mis labios
Y ahora que todo ha cambiado de repente
Que no te encuentro entre tanta gente
Ahora que se cuanto te amé
Me olvido de tu mirar inocente
Si alguna vez vuelves a quererme
Déjame vivir agarrado a tu vientre
No te pido más solo quiero tenerte.
Llegaste de un tiempo desconocido
Donde los hombres esclavizaron al amor
Donde todos sentían impregnado en su piel
el dolor
Donde todo sentimiento fue abandonado
Alumbraste cada deseo de mi corazón
Dejaste que solo mi alma hablase por mi
boca
Eran tiempos de cambio
Te reconocí cuando la noche era más oscura
Llegaste al borde de mi locura
No sentí jamás un amor tan inmenso
Borraste de golpe de mi vida la palabra
sufrimiento
Me llenaste de un nuevo aliento
Aire que use para decirte palabras de
enamorado
¡Dios mío, qué hermosura!
Te convertiste en mi pequeña locura
Amé cada segundo de tus dudas
Desperté tus caricias escondidas
Me creaste un nido en tus besos perdidos
Navegué por cada mirada que me lanzabas
En un mar azul, lleno de mis deseos y de
tus recelos
Así empezó nuestra historia
Así conocí contigo la gloria
Nunca he vuelto a sentir la prisión de la
cordura
Contigo recorro esta infinita pasión
En ti encontré mi pequeña locura.
Sus manos se acariciaban sin prisa
Sus besos eran tiernos como dos niños que
juegan
Sus lágrimas solo dibujaban risas
En sus arrugas marcadas, Vivian mil
historias
Lentamente se abrazaban, en un abrazo
infinito
La ternura era su lenguaje
La espera del otro su mayor anhelo
Nada rompía su amor sereno
Se decían “te quiero” casi sin palabras
Todo el mundo les parecía ajeno
Su espacio era solo ellos dos, y una
brizna de cálido amor
Derramaban ese olor a otoño después de una
fina lluvia
Ella se atusaba el pelo, después de sentir
las manos de él
Él enredaba cada uno de sus dedos en su
cabello blanco
Se perdían horas mirándose a los ojos
Nada les gustaba más que viajar en la
mirada del otro
El rodeaba su cintura queriendo iniciar un
vuelo hacia el universo
Ella se dejaba llevar como una hoja caída
mecida por el suave viento
No existía el tiempo ni el espacio, solo
ese momento
Las horas eran siglos de amarse el uno al
otro
Nunca temían que llegara el invierno
Solo sentían su amor sereno
De vez en cuando cerraban los ojos
Para disfrutar de un nuevo encuentro
Así pasaron la vida, así se amaron sin
miedo
Siempre con tus dudas, siempre dudando
Siempre con tus miedos, siempre huyendo
¿Por qué no oyes lo que te estoy cantando?
Te quiero tanto que escribo mis canciones
sobre una nube
Te deseo tanto que me abrazo en silencio
al aroma que desprendes
Cada desaire que me das, son agua que
guardo en mis ojos
Agua que serán las lágrimas que derramaré
en tu ausencia
No puedo pensar sin tenerte en el rincón
de mi anhelo
Eres quien me encuentra cuando sin ti me
pierdo
¡No ves que locura es no amarnos!
¡No sientes el silencio que existe sin
nuestros besos!
Lanzo mis requiebros hacia el viento
En el aire voy cantando
Son canciones de trovador enamorado
Son poemas de un corazón abandonado
Me escondo del miedo que me da olvidar
cuanto te amo
Renuncio a la vida, si no es estando a tu lado
¡Qué más necesitas para darme tu amor!
¡Qué adagio sonará si no estamos juntos
para oírlo?
¿Que nos traerá la noche?
Todas las estrellas para mirarlas en el
cobijo de nuestros labios
En el aire voy cantando
Son canciones de trovador enamorado
Son poemas de un corazón abandonado
Este cuento, me lo conto un ciego
Que perdió la vista después de un amor
ingrato
Ni siquiera pudo abrazarla, preso de un
arrebato
¡Maldito amor veraniego!
Sus ojos dejaron de ver, al no poder
contemplarla
Su llanto alimentaba su boca seca
Bebía lágrimas dulces
Toda la sal de su vida se la llevo ella
Se marchó de noche y sin ruido, ya no
quedaban en su cara luces
Él quedo cautivo en un sueño maldito
En sus ojos apagados, solo sentía frío
En su corazón seco ya no se oían los
latidos
Narraba su pena con palabras sin acento
En su vida nada tenía una alegría que
añadir a su cuento
Con cada línea expresaba su más hondo
pesar
Con cada silaba unía la cadena de una
condena, que no supo expresar
Hoy llora por las calles, borracho de
lágrimas dulces
Hoy muere poco a poco
Sin saber que su cuento es la historia de un amor que solo sentimos
entonces.
No tengo aire si pasas sin mirarme
No tengo alegrías si no veo tu pelo negro
·
Como me gusta cuando me nombras
·
Si no estás junto a mí, me muero
Desde que te amo solo te espero
Si estas junto a mí, mi corazón es un
velero
He pintado en tu pared todos mis “te
quiero”
Quien te hizo ese corazón lleno de ternura
Si estas junto a mí no temo a la locura
Cuando me sonríes no necesito el sol
Solo tu luz ilumina este loco amor
No tengo aire si pasas sin mirarme
No tengo alegrías si no veo tu pelo negro
Como me gusta cuando me nombras
Si no estás junto a mí, me muero
Desde que te amo solo te espero
Si estas junto a mí, que me importa la
mañana
Eres el refugio que me abraza.
·
Si no estás junto a mí, me muero
Desde que te amo solo te espero
Es la canción de un tiempo pasado
Son los sonidos de un amor olvidado
De tu mano rozando mis labios
De mi boca queriendo besarte
Si aún recuerdas cuanto te quise
Si no estás amando a otro cuerpo
Mi canción está escrita sobre tus gestos
Mis letras son caricias que no te he dado
Es la canción de un tiempo pasado
Son los sonidos de un amor olvidado
En los días en que te abandona la
esperanza
Buscas como un loco retazos de tu añoranza
Te agarras a la ilusión de una presencia
infinita
Para querer oír cómo me decías ¡te amo!
Con tu dulce boquita
Es la canción de un tiempo pasado
Son los sonidos de un amor olvidado
Todos los instrumentos sabrán tocarla
Todas las voces querrán cantarla
Quien no amó a la orilla de un mar en calma
Quien no recito versos sin más letra que
los suspiros del alma
Es la canción de un tiempo pasado
Es lo que me sale de mi cuerpo enamorado.
Con las tarde que pasé esperándote
Y tú sin asomarte a echarme un beso por el
balcón
Que te ha hecho mi pobre corazón
No hay manera que me digas una palabra
hermosa
Solo quiero que seas mía, no te pido otra
cosa
Decídete a amarme, Que me estoy volviendo
loco
Solo tienes que quererme toda la vida, te
pido muy poco
¡Pero tú eres tan orgullosa!
Que te ríes de mis palabras, con esa boca
caprichosa
Te he comprado un espejo redondo
Si te miras bien, estoy escondido en el
fondo
Como te cuesta tanto, decirme que quizás
tenga un hueco en tu abrazo
¡Cómo te escapas todas las noches de mis
lazos!
Decídete a amarme, Que me estoy volviendo
loco
Solo tienes que quererme toda la vida, te
pido muy poco
Todos se ríen de mí, por seguir corriendo
detrás de ti
Sigue sembrando tu calle de piedras
Que tarde o temprano llegare a tu puerta
No te das cuenta que soy un nombre anónimo
si tu no me llamas
No te das cuenta que solo vivo si me amas
Decídete a amarme, Que me estoy volviendo
loco
Pero hazlo deprisa, que sin ti, ya solo me
equivoco.
Ya no quiero seguir esperando
Me estoy oxidando de no moverme
Ya no quiero seguir callando
Prefiero gritar este querer que continuar
olvidando
Ya no quiero seguir buscando
Me ha salido un roto en medio de la
ilusión
Se me habrá partido el corazón
¡Tan hermosa y tan ligera!
Que no puedo cogerte ni cuando paseas por
mi acera
¡Mira que sabes cómo mirarme!
Para dejarme destrozao, sin saber ha que
agarrarme
Con esa cara que es un recital de bulerías
Si quieres nos damos todas las alegrías
¡Anda dime que sí, que solo quiero tu boca
con frenesí!
Ya no quiero seguir esperando
Me estoy oxidando de no moverme
Ya no quiero seguir callando
Prefiero gritar este querer que continuar
olvidando
Tenemos todas las caricias sin usar
Empecemos a gastar nuestros cuerpos
Con suavidad, y sin abusar
Te quiero besar con la luna en tu ventana
No te escondas, se que tu también tienes
ganas
Ya no quiero seguir esperando
¡Vamos niña que nos estamos amando!
Que verso acompasa lo que dice el duende
con su boca de loco descarado
¿Donde busca para encontrar sus anhelos
escondidos?
¿Qué sueños inventa de amores prohibidos?
Solo son palabras, o tienen vida, hechas
de sentir
Nada se escapa de una mirada de amor
Todo lo oscuro se vuelve color
Cualquier papel es una hoja de un verso
infinito
Le sirve una sonrisa para construir un
edén hermoso y pequeñito
Donde quepan su amor y unas manos a las
que acariciar
Que hermosa palabra escribe el enamorado
Que música suena, si no es para cantarle
al oído
Estas coplas que son mi amor hechas sonido
Lloro, lloro, no dejo de llorar
Se ha ido mi amor y no sé a qué lugar
Que tengo que hacer para encontrar su
sombra
Que rincones esconden sus huellas
Yo la quiero, ¡por qué se va!
Tengo miedo a vivir con su soledad
Acaso le dije no, queriendo decirle si
Ella me conoce, solo soy algo si me ama
Si no la tengo en mi despertar, para que
preciso respirar
Lloro, lloro no dejo de llorar
Aquí estoy, vacio sin sus manos que
acariciar
Me olvido de mí, sin su presencia
En mi llanto solo contemplo su ausencia
Lloro, lloro no puedo dejar de llorar.
Cuando sepas que ya he llegado
Sentirás que tu cortina se balancea sin
parar
Cuando quieras decirme ¡hola!
Ya tendré tu boca entre mis labios
Solo eso será el empezar
Si me dices con cara de sí, que me vaya
Te cogeré las manos y te invitaré a bailar
Si siento que tus ojos no miran a los míos
Sabré que solo quieres mi mirada
Cuando te vas de mi abrazo
Me ahogo sin ti, como quiero al aire
Tú me haces respirar debajo del agua
Tú me das las alas de mi vuelo
Tú llenas de calor mi lengua
Como quiero al aire, te invento en mi nido
del árbol naranja
Aunque te cubras la cara para no besarme
Soy los hilos de seda que rozan tu boca
roja
Venga mi amor, no intentes dejar de verme
Estoy a tu alrededor, amándote, como
quiero al aire.
Esta es la última canción que oirás de mi boca
Solo queda un triste recuerdo
No podré mirarte a los ojos como loca
Has destrozado mi vida
No con lágrimas
Lo digo con amargura
No supe mirar donde estaban tus dudas
Ya no tengo letras que hablen de amor
Solo compongo sonetos de mi hastiado dolor
Eras ese hombre que caminó por mi senda
Ahora no queda nada de tu escondida leyenda
Sé que no sufres por mi silencio
Desde hace mucho dejaste de oír mis ruegos
Sigo siendo la palma de esa mano que te gustaba leer
Si alguna vez vuelves a tomarla
Solo verás un vacio donde reflejabas tu luz.
Quiero llenarla de nuevos surcos hechos de esperanza
Tu ya no estás, solo eres una arruga en mi memoria.
Era el momento de vernos de nuevo
Era la única forma de decirnos te quiero
Nos refugiamos en nuestra ciudad inventada
El cielo nos regaló nubes con formas de caricias
ensartadas
Quisimos encontrarnos después de la noche oscura
Tanto tiempo sin amarnos con esa locura
¡Qué ciudad nos envuelve!
La que construimos tú y yo
Con el aroma de los besos que dejamos de darnos
En cada espacio están tus miradas y mi espera
En esta ciudad de la pasión
Abriré un camino de una sola dirección
No podrás dejar de respirar el aire que traigo
escondido en mi corazón
¡Venga corre, que no tenemos tiempo que perder!
Sigo intentando buscarte sin que lo sepas
Por mucho que te escondas, no podrás perderme
Por mucho que te escondas, no podrás perderme
Soy el trozo de alma que no sabes que has
perdido
Sin lo que tenemos todo será distinto
Me he acostumbrado a verte junto a mi
sueño
Entre tus brazos me haces tan pequeño,
En ti encuentro el abrigo que pierdo
estando despierto
Aunque me digas que no, Seguiré amando tu
llegada
Aunque me digas que no, oiré las palabras
de tu boca callada
Nada es tan fácil como amarte
Tienes un corazón hecho de latidos Construidos
de mil amores conocidos
Aunque me digas que no, sé que tu alma
está esperando mi llegada
Aunque me digas que no, somos lo que el
amor inventó para escribir esta balada
Ya no hay respuestas a las preguntas
Solo hay amor sin miedo a lo que esté por
llegar.
He inventado un sonido que solo tú podrás
ver
Tiene tantos colores, que es un cuadro por
el que te podrás perder.
Aunque me digas que no, solo te doy lo que quieres, mi amor
Como he podido amarte, si solo me has dado llanto
Como he podido amarte, si aún te ríes de mis besos
Que larga es la noche, cuando ya no tienes quien te
abrace
Donde mirarán mis ojos sin tu mirada
Sé que no quieres volver a verme
Todo lo nuestro es ahora nada
Siempre fingías estar enamorada
Y te creí por qué no se vivir sin el alma ocupada
Ya no te espero junto a tu casa
Solo tendrás un vacio en el corazón
Sueño que aún te queda un pedazo de ilusión
Me voy sin decirte adiós
No te recordaré jamás, serás la huella de un dolor
Como he podido amarte, si no olimos las mismas flores
Como he podido amarte si juntos siempre fuimos tres.
Ya te habías
marchado, sin decir adiós
Desde mi ventana,
nunca te vi tan lejos
Ahora solo eres
de mi esperanza un reflejo
¡Cómo no supimos
amarnos en el rellano de tu casa!
¡Cómo solté tus
manos en aquella tarde!
Con ese olor que
impregnaba de azul el espacio entre tú y yo.
“Todo era
distinto cuando aún nos mojaba la lluvia
Nada era igual
que estar riendo de la prisa
Somos lo que
existió en un estribillo eterno”
Ese pantalón
tejano y roído
Esa camisa ancha
sin color
No había nada
más que tu sabor
El cielo siempre
nos daba un espacio donde dibujar nuestra tarde
Que lenta era la
despedida desde el final de la escalera
Vivo sin ti en
una eterna espera
“Todo era
distinto cuando aún nos mojaba la lluvia
Nada era igual
que estar riendo de la prisa
Somos lo que
existió en un estribillo eterno”
Todas mis canciones
suenan sin letra
Te dejaste a mi
lado la sombra de tu caminar
Ahora soy una
silaba sin palabra a la que unirse
Un corredor que
no encuentra su meta
Te recuerdo
apoyada en la esquina de nuestros silencios
¡Qué fácil era
ser nosotros!
“Todo era
distinto cuando aún nos mojaba la lluvia
Nada era igual
que estar riendo de la prisa
Somos lo que
existió en un estribillo eterno”
Los años se van
vistiendo de blanco
Los sentimientos
son un álbum de fotos
Los encuentros,
una tarde en el parque sentados en un banco
Mi boca sin tus
besos, un paisaje desdibujado
La memoria, un
camino hacia arriba
Tu nombre, la
llave de mi nostalgia
¿Qué perdí sin
tus manos?
Tu cuerpo
envuelto en magia
La sonrisa de
unos ancianos
Fueron solo
palabras
Versos en un
camino que nunca acaba
¿Dónde está tú
voz?
¡Que soledad tan
atroz!
Me perdí en un
poema dónde estabas tú
Arañe los
verbos, escarbe en los acentos
Solo son
palabras
No te encontré
en la rima
Te fuiste en la
primera lágrima
Dejaré que sean
mis noches, las que te traigan
Vendrás desnuda,
Llenaras la
frialdad de mis sabanas
No pido nada,
solo son palabras
Me pregunto, ¿donde estas amor?
Que no hice por tenerte
Cuanto grite al perderte
Te fuiste el mismo día que comencé a amarte
Nadie escucho mi suplica, me convertí en un esclavo del dolor
Desde entonces me tienes preso de amor
No son palabras sin una razón
Viajan desde lo más profundo de mi corazón
Como ignorar que sin ti soy un vacío
Como no ver que sin tus ojos, mi alma es un campo baldío
Solo quiero decirte una palabra
Dame una ilusión para vivir
Dejare que mi vida ante ti se abra
Llego de un destierro sin tu cuerpo para abrazar
Que mayor sufrimiento que no sepas que por ti, he vuelto a llorar
Mi pena se ha vuelto gris y espesa
En mi mundo ya no hay color
Solo se repetir, me tienes preso de amor
Te envío una señal escrita en la lluvia de verano
Son las caricias que escapan de mis manos
Los violines suenan en mi mente inquieta
Es la locura de no pasear este amor, con mi alma de poeta
Mis letras son un callado rumor
En mis días te sueño despierto
En mis noches, como una letanía repito
me tienes preso de amor
Vamos corriendo que llega el día para amarnos
No cojas nada, todo cabe en nuestras manos
Solo queda un tren para llegar al paraíso
Quiero que sepas que te amo,
por si me ignoras, te lo aviso
Qué risa nos da la impaciencia
Nos besamos con la torpeza de la adolescencia
Es una aventura compartir contigo el deseo
Siempre me das más de lo que espero
He aguardado tanto tiempo en la estación de los amores
Que ahora me enloquece ver llegar el tren de tus sabores
Si algún día te olvidas que existo, me volveré invisible
Solo busco tu abrazo, no tengo nada más que pedirte
Ya siento la brisa del día que llega para amarnos
Mi espera se ha vuelto esponja, donde absorber el calor de tus manos
Vamos corriendo que llega el día para amarnos
No quiero perder un segundo sin decirte versos de amante
No quiero que te vuelvas viento, y te escapes de mis brazos
Aquí me tendrás por siempre, soy tu caballero andante.
Déjame, acariciar tu sonrisa
Mírame, ¡cómo me enamora tu risa!
Eres el aire envuelto en pasión
Escondí en tu bolsillo mi corazón
Invente un beso solo para tu boca
Son tus labios los que a mí me tocan
Déjame enredar tu pelo
Tengo un peine entre mis dedos
Me enloquece tener para mí tus deseos
Déjame columpiar tu cuerpo
Mirar tu cara, es ver la luna llena en
agosto
No existe nada tan hermoso como tu rostro
Déjame ser quien te diga cada mañana
¡buenos días!
Soy quien te sueña, solo para amarte
Déjame darme entero, no solo una parte
Si me pronuncias, te doy una flor
Es el principio de mi amor
Déjame caminar junto a tu fragancia
Te pido que me dejes amarte sin distancia
Olvide que sin ti no tengo recuerdos
Marche solo, sin llevarme nada
Solo, en una dirección de murmullos dormidos
En la ciudad odiada, Que ahora reza entre
quejidos
Escribí en las aceras mi nombre para no
seguir tú huella
Me ahogue en las fuentes heladas de
diciembre
No pude ver tu vacío en la luz de una
cerilla
Escarbe en mi memoria, quemada por la
fiebre
Solo halle tristezas hechas de arcilla
Son mis manos un campo sin arar de
caricias
Es mi cuerpo un árbol talado de hambre por
sentirte
Olvide que sin ti no tengo recuerdos
Me abandonaron con premura todas las
sonrisas
Se unieron a mi ceguera por amarte, todos
los solitarios
A escondidas, los sueños se marcharon sin
decir adiós
Entendí que sin ti no vive el amor
Ahora voy despacio en busca de tu abrazo
Lo encontraré donde no me queden arañazos
Ya no habitan recuerdos en mi alma helada
por tu ausencia
Olvide mis nostalgias en una niñez de amor
e impaciencia
Olvide que sin ti no tengo recuerdos
Olvide que sin ti camino entre muertos
Donde estas que no te encuentro
Donde ríes que no te oigo
Si
no oyes mi lamento, mírame
Te estoy buscando sin saber
Escúchame te habla mi sentimiento
Soy la agonía de un loco que perdió su
querer
Tengo de ti todos los sueños que nunca
veré
Te escondes donde solo un amor como el mío
te encontrará
Busco en ese lugar que anida la esperanza
de ser ola en tu mar
Tengo de nosotros las más bellas historias
de amor
Solo tu mano es mi guía, sin ti pierdo la
vida
Ayúdame a no caminar sin una senda
Te Bajare de una nube mi más dulce ofrenda
¡Donde te escondes! Que miedo te aparta de
mí
Dame una señal, no me hagas sufrir
Soy un abrazo al llegar, y un beso al
despedir
No se buscarte sin mirar mi corazón
Estás ahí desde el día en que te vi
Te encontraré donde vives agarrada a la
pasión
Por siempre te amaré, eres quien para
vivir, me da la ilusión.
Cada día voy contando lo que me queda para
verte
Cada noche voy soñando lo que me queda
para desnudarte
Las horas son eternas sin ver tu boca
Te espero sin prisa, con mi alma como loca
En los vacios que son mi vida sin ti
Los lleno de caricias del deseo que
contigo compartí
En mi puerta no hay cerradura
Se abre siempre con tu ternura
¡Quiéreme como sabes!
¡Quiéreme con locura!
¡Dame tus besos tan suaves!
Sin lo que nos queda construiremos nuestra
casa
En cada piedra escribiré tu nombre
La tristeza siempre será escasa
No pidas que a tu ausencia me acostumbre
Llorare con la luna, y reiré con el sol
Solo te estoy hablando de amor
Sin lo que nos queda viviremos en un mundo
que no está aquí
Que tan solo existe en mi pasión por ti
En el espacio de tu inmensa presencia, a
mi pena combatí
Donde imagines mi abrazo, estarán mis
manos
Con el brillo de tus ojos iluminaremos la
oscura pena
No me esperes más, ya estoy en tus venas.
En mi puerta no hay cerradura
Se abre siempre con tu ternura
¡Quiéreme como sabes!
¡Quiéreme con locura!
¡Dame tus besos tan suaves!
Di mi nombre y dejaras de llorar
Si al pedir amor recibes silencio, No
temas
Estoy amándote donde guardas las penas
En tu soledad estaré para darte mi amor
En el vacío que da la noche Abrazaras mi
alma
Y si alguna lagrima por tu rostro camina
Déjame que sea yo quien la recoja, ¡mi
vida!
No dejes de soñar que tu corazón vibra
No tengas miedo si tu querer se quiebra
Yo amare por los dos, esa será mi obra.
Cuando sientas que la pena te viene a
visitar
Di mi nombre y dejaras de llorar
Si en tus besos no hay aire, seré oxigeno
para tu boca
Donde guardes la pena, estaré contigo como
una roca.
Ya no hay llanto en tu mirada
Solo veo sonrisa ¡ay mi amada!
En las heridas que forjaron tu dolor
Construiré nuestro paraíso de amor
Ya no quedan cicatrices del olvido
Solo mis caricias, de amante atrevido
¡Deja ya de buscarte en las penas!
¡No ves como te estoy amando mi dueña!
Cuando sientas que la pena te viene a
visitar
Di mi nombre y dejaras de llorar
Si al pedir amor recibes silencio, No
temas
Estoy amándote donde guardas las penas
CANCION DE RECUERDO
Si te empiezo a recordar se me parte el alma,
Me he perdido queriéndote buscar y nunca hayo nada.
Ayúdame a olvidarte
O enséñame a morir sin ti
Quererte es mi obsesión;
Y mi corazón no encuentra la calma.
Dime quien soy para no olvidarme
Aráñame la herida
Sin miedo a dañarme.
¡Mírame! Sin decir nada.
Déjame solo acariciarte.
¿Quién soy si tú me dejas?
Me falta la vida si te alejas.
Solo en tu cuerpo entiendo el alba,
Solo en tu boca encuentro mi ausencia,
Escúchame, mi corazón te habla.
¡Mírame sin decir nada!
Sin tu abrazo solo soy humo.
Déjame que sea tuyo.
Dame todas tus penas,
Las convertiré en cosas buenas.
¡Mírame sin decir nada!
PARA LA PRIMAVERA
En primavera vestiré tu balcón con flores rojas
Y sabrás que mi corazón espera que lo escojas.
En tus ojos no habrá nunca lágrimas,
Los llenare de luz para que sepas que es a mí a quien amas,
Dime niña que falta en tu jardín
Te traeré todas las flores del fondo del mar en el pico de un delfín.
¡Venga dímelo! Como quieres amarme.
Para que balancees mis te quiero
En la yerba pintaré un corazón
Y tus pies descalzos pisaran la senda de mi amor
Dame tus lunares para mirar mi universo
En cada hoyuelo de tu sonrisa
Construiré un estanque con el agua más clara,
Y en el reflejo escribiré mis versos
¡Venga dímelo! Como quieres amarme.
Para llenar de colores tus miedos
Dame tus manos para rozar los pétalos que cubrirán las caricias
El viento será nuestro aliado, y nos traerá para amarnos su más cálida
brisa
Toma todas las hojas que han caído de mi alma
Son para ti, guárdalas bajo tu cama.
¡Venga dímelo! Sé que te mueres por besarme
¡Venga dímelo! Como quieres amarme
.
RUMBA PARA MI MORENA
Si algo me está matando son tus olvidos tan largos
Quiero bailar contigo
Con tu vestido de raso blanco
No quiero sufrir tanto,
Quiero ser la sombra de tu llanto
Dame el pañuelo verde, el peine de tus rizos negros
Dame y el fuego de tu mirada
Quiero tener la luz tan clara de todas tus mañanas.
Romperé la escarcha
En el frio de tus noches de invierno.
Le ladraré a la luna si no ilumina tu ventana
Les cantaré a las hadas que soy tu duende, mi enamorada
¡Quiéreme con ternura como si fuera tu perro!
¡Déjame que te cante lo mucho que por ti me muero!
La llenare de luces para verte la cara, mi tesoro.
La música abrazara tu silueta
Y en mis brazos te daré mil vueltas
¡Ay niña como quiero tu risa!
¡Ay niña como te amo sin prisa!
Dime que tú me quieres,
Dame y el fuego de tu mirada
Quiero tener la luz tan clara de todas tus mañanas.
Recogeré mil conchas para ti de mi playa,
Te ataré con la cinta blanca de mi capa, para que no te vayas.
Romperé la escarcha
En el frio de tus noches de invierno.
Le ladraré a la luna si no ilumina tu ventana
Les cantaré a las hadas que soy tu duende, mi enamorada
¡Quiéreme con locura lo mismo que yo te quiero!
¡Quiéreme con ternura como si fuera tu perro!
¡Déjame que te cante lo mucho que por ti me muero!
BOLERO SIN NOMBRE
Si aprendiste ya a olvidarme
Si dejaste de quererme
No lo quiero saber nunca, déjame con tu recuerdo.
En mi vida ya no hay calma.
Dime como vivir sin ti
Aprenderé de nuevo a sentir
Tu querer no era profundo
Me mintieron tus besos, en tu boca de hielo.
Ahora soy un vagabundo
Perdido en tu cielo.
En mi vida ya no hay calma.
Dime como vivir sin ti
Aprenderé de nuevo a sentir
En mis noches de frío no te hallo jamás
Te deseo un nuevo amor
Me marcho sin que veas mi dolor
Si alguna vez me anhelas, grita mi
nombre
Romperé mi barco, y quemare las velas.
Aprenderé de nuevo a sentir
Destrozaste nuestro mundo
Tu querer no era profundo.
COPLA DE AMOR Y RABIA
Ya no quiero ver tu silueta pasear por mi cama
Desde tu ausencia me olvide de reír
¿Cómo has podido dejar de quererme?
¿Qué me pediste que no te diera?
En mi cocina ya no hay olores
No tengo silencio para poder oírte
Aunque me lo supliques,
Ya no quiero volver a verte, ¡déjame!
¿No ves cómo me has tratado?
En todas mis noches te amé, como aman los condenados
¿Dime que nos ha pasado?
No me digas que te he fallado
He olvidado del amor lo que tú aún no has aprendido
Fue una locura quererte
Solo fui una pieza de tu colección
Me besaste sin corazón
Sé que mi dolor te divierte
En mi cocina ya no hay olores
No tengo silencio para poder oírte
Aunque me lo supliques,
Ya no quiero volver a verte, ¡déjame!
Mira este cuerpo que ahora está roto
Jugaste conmigo, ¡cómo te odio!
Callare para siempre, Y me marchare sin ruido
Solo fui para tu cuento, un episodio.
¿Dime que nos ha pasado?
No me digas que te he fallado
Fue una locura quererte
Solo fui una pieza de tu colección
Me besaste sin corazón
Sé que mi dolor te divierte
Has manchado mi amor de carmín, solo eso me queda
Te deseo mucha suerte
Inventare un paisaje para comenzar mi búsqueda
En todas mis noches te amé, como aman los condenados
¿Dime que nos ha pasado?
No me digas que te he fallado
TE QUERRÉ SIN TI
Desde mi casa a tu puerta hay una vida sin vivir
Desde mi memoria a tu olvido,
solo vuelan sonrisas en el encuentro
Cuando te imagino con otro compartir
Me ahoga lo que por ti siento
Sueño contigo y en tus dudas me alimento
Si no estás, solo quiero huir
Te querré sin ti, como quiero a mi mañana de esperanza
Te querré sin ti, como canto sin música
Te querré sin ti como quiere un niño a su fantasía
He roto mis fotos para no verme con tu ausencia
He cambiado mi nombre para no recordarme sin ti
Mi maceta ya no me habla, cuando la riego de noche
A mi hambre siempre le falta sal
Conmigo la soledad se invita a derroches.
En mi corazón late un universo sin gravedad
Te querré sin ti, como quiero a mi mañana de esperanza
Te querré sin ti, como canto sin música
Te querré sin ti como quiere un niño a su fantasía
Quiero un poema de alegría
Apartaré de nosotros la melancolía
Invitare a bailar a la farola que recuerda mi oscuridad
Llenare mi casa de nosotros
Estarás siempre en el hueco de mi sillón
Aunque no estemos fundidos hablaremos de pasión
Te querré sin ti, y también sin mi.
PASARE A BUSCARTE PARA IR AL CINE
Voy deprisa por la calle ancha de tu barrio
Porque sé que quieres ir conmigo al cine
Pasaremos antes a comprar esas almendras que tanto te gustan
Iras envuelta en tu bufanda azul que ciñes el cuello que acaricio
¡Qué friolera eres vida mía!
De tu mano mi película eres siempre tú
En la pantalla solo veo caminar tu cuerpo
La banda sonora será la risa que me regalas
cuando beso tus dedos
Pasare a buscarte para ir al cine
Te abrazaré mientras caminamos en silencio
Susurrare palabras de amor al oído,
esas que te digo en la alcoba cuando callamos
Apartare las hojas del suelo
Silbaremos la canción que nos unió
Apoyaras tu cabeza en mi hombro, ¡qué bien huele tu pelo!
Sé que quieres ver una historia de amor
¡Como coges mi mano si sientes miedo!
¡Qué locura que sea a mí a quien dices te amo!
Cuantas horas mirando cine, todas las películas somos nosotros
Envueltos en pasión, se ausenta toda la ficción
En las butacas pasan dos horas de amor
En el silencio oigo como me dices ¡“bésame”!
Al terminar la cinta, volvemos a casa sin hablar
Con las miradas nos decimos ¡qué alegría tenerte aquí conmigo!
De tu mano mi película eres siempre tú
En la pantalla solo veo caminar tu cuerpo
La banda sonora será la risa que me regalas
cuando beso tus dedos
Pasare a buscarte para ir al cine.
-¡Hasta donde vamos a llegar! Gritaba Andrés, desesperado por no encontrar
donde había guardado la mujer su reflejo en el espejo. Decía en voz alta:
-¡Esta Concha siempre me cambia las cosas de sitio, cualquier día me voy y
no vuelvo jamás!-.
Removió todos los cajones del dormitorio sin desordenar nada, sabía que a
ella no le gustaba que anduviera trasteando, porque luego nunca ponía las cosas
en su sitio. Nada en los armarios, ni en la cómoda, ni siquiera en el lugar
secreto donde ella guardaba los pocos dineros que sisaba de la compra.
Estaba desesperado preguntándose ¿dónde pudo esta mujer esconder su
reflejo? Se sentó en la silla de mimbre de la cocina, adornada con un cojín de
flores lilas con sus cuatro cuerdas atadas a las patas para no moverse, repasó
todos los estantes de la habitación con la vista, deteniéndose en cada frasco y
en cada recipiente. Nada le resultaba extraño, todo estaba donde siempre y como
siempre, Concha era muy apañada para las cosas de la casa.
Dirigió sus ojos hacia el suelo de la cocina, las baldosas blancas y negras
se intercalaban formando un mosaico infinito. Ese suelo siempre estuvo en sus
discusiones, ella quería cambiarlo mientras que para él era muy fino tener un
suelo con esa decoración; Se detuvo un instante a pensar sin moverse del
asiento, se interrogaba mentalmente, como una letanía, si ella le estaba
intentando dar una lección por haberse olvidado el otro día el felicitarla por
su santo.
Se decía ¡no imposible! Esta mujer no me haría una cosa así, sabiendo lo
que a mí me disgusta que me toque mis cosas particulares.
Al ver que no había modo de encontrar lo que buscaba, decidió esperar a que
se mujer volviese de la compra. Se acercó a la sala del televisor, se sentó en
el butacón marrón que había junto al sofá donde su Concha se tumbaba a ver la
tele, cuando llevaba un buen rato sentado, los ojos se le cerraban de sueño, su
cabeza comenzó a inclinarse para un lado hasta quedar completamente apoyada en
el cabezal del respaldo; Después de unos minutos de sueño, que a Andrés le
parecieron horas, su mujer le tocó el hombro diciéndole:
-¡Despierta hombre que te vas a hacer daño en el cuello!.-
Él levantó la cabeza y la miró fijamente a los ojos, notaba algo extraño en
ella, su rostro desprendía una luz especial como iluminada por una lámpara que
no calentaba. Concha sonrió, y en su cara vio todas las alegrías que había sentido
durante la vida junto a su marido, él quedo en silencio sin saber que
preguntarle mientras ella con sus dos manos acarició la cara de su amado
Andrés, deslizó sus manos con mucha suavidad y dulzura por su cara llena de
pliegues.
-Le preguntó-¿Qué buscas marido?
-él contestó casi sin mover los labios: -He querido peinarme esta mañana y
al mirarme en el espejo no me veía, ¿sabes dónde está mi reflejo?-.
Ella no dejaba de sonreírle, con una voz que parecía el comienzo de una
canción cantada por un coro de niños, le respondió:
-Si mi vida, ven que te voy a decir donde lo guarde esta mañana-
Los dos se aproximaron al espejo; Ella le cogió la mano mientras él
caminaba casi sin pisar el suelo. Cuando ambos estuvieron frente al cristal, la
luz de Concha era también la luz de Andrés.
Se miraron el uno al otro y ella dijo-¿ves ahora tu reflejo?-.
-¡Si, ahora si lo veo! Pero esta en ti.-
Claro corazón ya no somos nosotros, ahora son nuestras almas que han
partido hacia el infinito; Ya no hay cuerpos ni reflejos. ¡Vamos que llegamos
tarde y ya sabes que la felicidad no espera a nadie si llegas tarde! Andrés
miró a su Concha y juntos partieron.
Estaban acabando el postre, Juana y Pedro, cuando ella le espetó:
-¡Niño! ¿Cuantas veces me has dicho que me quieres?
-¡mujer! a que viene esa pregunta, contestó Pedro mientras le limpiaba
restos de tarta de chocolate que tenía Juana en la comisura de los labios,
sabes que para mí no hay nadie, ni nada más importante que tú, además siempre que me haces esa pregunta
te contesto lo mismo.
- Si, pero no sé yo si eso es verdad, últimamente me lo dices poco.
El miraba a través de la ventana del octavo piso, e intentaba encontrar
alguna respuesta distinta, pero solo
veía tejados, en aquella noche clara y llena de estrellas apagadas, necesitaba
un argumento que agradara a su mujer y
la hiciera feliz por una sola vez más , suplicaba en silencio desde que en ella
hiciera aparición la enfermedad del olvido, cada día se encontraba en la misma
situación, ella desvanecía en su memoria blanca, todas las palabras que su
amado esposo le decía, y el ya no atinaba a pronunciar las palabras más dulces
que contentaran el corazón de Juana, su capacidad de crear lenguaje ya se
habían agotado, y después de tantos años conviviendo con ella y su enfermedad,
no podía más, y decidió decírselo, aunque esta fuese la última.
¡Mira mi niña!, si pudiese volar, te cogería de la mano y te llevaría a
recorrer el cielo, para que vieras desde ahí arriba, que no hay nada por debajo
que yo ame más que a ti.
-¡si, si!, contestó ella.
-Y si te pidiera que me amaras más que a tu propia vida ¿qué harías?
-Desde que te vi por vez primera te quiero más que a mi vida.
¡Vale, pues demuéstramelo!
-Ven mi amor dame la mano. Le dijo Pedro, agarrándole fuertemente su mano,
llena de surcos, con unos dedos
huesudos, largos, blancos y sin brillo en las uñas. El acababa de notar un
pinchazo en el alma, sabía que por mucho que lo intentará jamás lograría que su
mujer volviese a mirarlo, como quien era. Su amor.
La asió, le dio un beso en los labios, la abrazó con fuerza, se acercó
hacia el balcón, y juntos saltaron desde el octavo piso. Mientras caían, ella
lo miró y le sonrió, y solo tuvo tiempo de decir unas palabras antes de que sus
cuerpos se estrellaran contra el suelo.
¡Cuánto me quieres!